Amanecí en las trincheras,
un golpe en la sien,
tan certero como el vodka,
despertó la realidad a empujones,
me expulsó de nuevo del espejo.

De esta parte el frío como consecuencia
de mi estado de ansiedad,
en un mundo vacío con horarios
y ropa de marca...

... no quiero seguir aquí,
lo divino se esconde bajo cartones
y vino barato.

Llego al punto exacto,
se equilibran las ondas cerebrales,
nitidez viscosa, alejas la moscas fantasmales,
no encuentro un mar donde sumergir
mis pelotas bañadas en plomo,
cada paso cae tras de mí
con tus muecas golpeando el cristal.

Ahora necesito descansar,
busco una manera para desintoxicarme...

...tal vez fuese por mi bien
- los orgasmos inflamables y las zarzas parlantes-
tal vez lluevan tripas de pescado
sobre el Manzanares.